Blackjack vs Baccarat: diferencias y beneficios puntuales

A continuación, vamos a mostrarte una detallada comparativa de dos juegos que parecen similares, pero que cuentan con desigualdades muy pronunciadas: Blackjack y Baccarat.

La vida se forja a través de las elecciones. Desde que nos levantamos en la mañana hasta la última hora del día, definimos nuestras actividades, casi siempre de manera impulsiva. Así como optamos entre tomar un té o un café con leche en las primeras horas día, la ropa que llevaremos puesta e infinidades de situaciones, nos pasamos la vida entera decidiendo.

Una elección siempre implica una renuncia. Saber elegir, en el buen sentido de la palabra, nos convencerá más del rumbo que decidamos tomar y será realmente beneficioso para encontrar un mejor desenlace. Esto se da en todos los aspectos de la vida, por eso, la virtud de la determinación es realmente importante para triunfar en lo que nos propongamos.

Sin embargo, algo aún más relevante que la determinación es el conocimiento. Si sabemos el clima que habrá en el día, podemos elegir entre llevar una chaqueta, paraguas o dejar en casa complementos innecesarios. Si creemos que necesitamos nutrientes, elegiremos una comida más cargada que si atravesamos un malestar estomacal. Saber elegir implica conocer mejor.

Diferencias sustanciales entre Blackjack y Baccarat: no son lo mismo

Por eso, desde nuestra página incentivamos a nuestros lectores a que elijan el juego de casino online que más se adapte a ellos con todas las herramientas posibles. Y, en esta ocasión, lo haremos poniendo en contraposición el Blackjack y el Baccarat.

En muchas ocasiones, Blackjack y Baccarat parecen lo mismo, pero hay sustanciales diferencias que interfieren en el desarrollo y los convierten en juegos muy distintos, que benefician más a uno u otro jugador dependiendo su estilo.

En la siguiente redacción te apuntamos todo lo que debes conocer para seleccionar de manera correcta el juego que más se adapte a tus gustos, tus características o conocimientos. Ambos podrán encontrarse en las principales páginas de juego en línea como 888casino o Betsson o en un casino físico, por lo que la decisión es completamente personal.

Los números de la suerte: 21 vs 9

La mecánica de ambos juegos de cartas cuenta con un objetivo en común: vencer al crupier. En este sentido, tanto el Blackjack como el Baccarat tienen como punto de referencia un número en particular, aunque dicho número difiere de un juego a otro. En el caso del Blackjack, es el 21, mientras que en el Baccarat se trata del 9. No obstante, el primero de ellos implica una mayor incidencia del jugador en el desarrollo, mientras que el segundo se centra más en el azar.

Blackjack

En el Blackjack, el jugador compite contra la banca con el objetivo de obtener una mano igual a 21 puntos o cerca de dicha cantidad, pero sin pasarse de dicho número. El jugador recibe dos cartas iniciales y, según la cantidad que sumen entre ambas, decide si volver a pedir o plantarse. Para ello, deberá tener en cuenta lo cerca o lejos que se encuentran sus cartas de sumar 21 y la carta visible del crupier. De esta manera, elabora una estrategia para saber cuándo pedir o plantarse con su mano.

Para los principiantes, a veces puede resultar algo complicado tomar la decisión entre pedir carta o plantarse en el juego del veintiuno. Para ayudarlos en su camino en este juego de cartas, existe lo que se conoce como «tabla blackjack». Esto no es más que una tabla en la que se muestra cuándo debes pedir y plantarte de acuerdo con la suma de tus naipes y la carta descubierta del crupier. Como pista, debes saber que, normalmente, el crupier se planta con 17.

Baccarat 

En cambio, en el Baccarat tenemos que obtener una mano de 9 puntos y la apuesta se hace sobre quien será el ganador de la partida: el jugador o el crupier… e incluso el empate. Si los puntos de la mano son más de 9, entonces se cuenta solo el segundo número del total. Por ejemplo, una mano de 15 puntos equivaldrá a 5. Aquí no hay opciones para plantarse o pedir otra carta, sino que serán las cartas lo que dicten el veredicto final.

Esto implica que las variables de retorno en el Baccarat sean fijas. Las mismas oscilan entre 1.06% para la apuesta de banca y 14.36% para la apuesta de empate. En tanto, la ventaja de la casa en el blackjack es variable: va desde 0.5% hasta 2%, dependiendo del tipo de apuesta, la estrategia empleada, la variante de juego, la cantidad de jugadores y en la mano en que se está disputando.

Conclusiones finales: ¿Es un juego mejor que otro?

Por todo lo anterior afirmamos que el Blackjack y el Baccarat no son lo mismo. El Blackjack requiere la toma de decisiones constante con base en múltiples factores y al menos algún conocimiento mínimo de la estrategia a utilizar. Mientras que el Baccarat es un juego de apostar y esperar, donde tu única decisión será cuánto arriesgar.

Así, queda claro que se trata de una toma de decisión completamente personal. Si te gusta tener el control de la situación, aprender y trabajar por tus ganancias, seguramente debas optar por el 21 Blackjack, como también se le conoce al juego. En el caso de que prefieras dejar todo en manos del destino, y relajarte mientras las cartas hacen todo el trabajo, tu juego es el Bacará. Es menos seguro, pero en muchísimas ocasiones, ha dado muy buenos dividendos como lo hacen otros juegos que dependen completamente de la suerte, como es el caso del bingo o las tragaperras.

Dentro de las ventajas de jugar Baccarat es que es un juego completamente de azar y nunca fallarás en una estrategia, mientras que las apuestas, que son limitadas, harán que exista un control sobre tus fichas. En tanto, la popularidad del Blackjack te permitirá encontrar mayor variedad de servidores, mesas, versiones y, como ya dijimos, tendrás la oportunidad de llevar las riendas del juego para incidir de manera directa en lo que ocurra con el resultado: matar o morir, pero siempre con tus decisiones.